Sobre el carril bici en Cartagena, por Francisco Javier García (‘La voz de la juventud’, abril 2016)

El carril bici supone un elemento esencial para cualquier ciudad a la hora de ayudar a descongestionarla de tráfico y disminuir el nivel de contaminación, así como para fomentar un transporte no sólo limpio, sino también saludable. A día de hoy, cada vez más ciudades amplían cada vez más su número de kilómetros de este valioso carril, pues se está extendiendo la conciencia de su importancia para el entorno urbano.

Si vas a darte un paseo en bici… ¡cuidado! Tendrás que enfrentarte a varios obstáculos. Los peatones invaden el carril bici, ajenos al peligro que ello supone. Otras veces, podemos encontrar niños que van con sus padres y no les alejan de dicho peligro, es más, les animan a caminar por dicho carril cuando perfectamente ven que viene una bici. También tenemos a los coches que no tienen más remedio que pasar por allí para incorporarse a la carretera (C/ Real, 3 puntos en concreto). En este caso, deberían de ceder el paso al ciclista, o al menos mirar si viene alguno. Más de una vez, hemos estado cerca de tener una desgracia por culpa del conductor, y lo sé por experiencia. Por otra parte, en el paseo Alfonso XIII, tenemos un carril bici que no dura ni una calle, lo que ocasiona las molestias de peatones y ciclistas. Me gustaría saber quién tuvo este tipo de ocurrencias.

Llegados a este punto, extraigo una conclusión: por el momento, los ciclistas no podemos gozar de los beneficios de un carril bici en Cartagena, debido a que no existe un nivel de concienciación adecuado sobre su uso. Creo necesario, para alcanzar este objetivo, fomentar el respeto mutuo entre ciclistas y peatones, alertar de la importancia del carril bici para Cartagena, así como promover el respeto que todos le debemos.