MI COMPROMISO. Por Juan Carlos Navarro, secretario general de las Juventudes de MC.

A lo largo de mi pequeña andadura política, he podido comprobar lo que significa pertenecer a un movimiento. Porque un partido político es tan sólo una más entre las muchas ramas de las que se compone un movimiento. Sin embargo, el partido político, es una de las más utilizadas para sacar adelante tal movimiento.

Hace tiempo que me he dado cuenta de que militar en un partido político no es sólo pegar carteles y dar ‘likes’ a sus posts en redes sociales, pues si en un principio ya me lo imaginaba, mi experiencia en las Juventudes de MC ha sido la que me lo ha confirmado y a su vez la que me ha llevado a redactar este escrito. Afiliarte a un partido político, no significa que acto seguido formes parte del movimiento que ese partido defiende. Un movimiento es algo realmente complicado. Todavía no he encontrado una definición clara para dicha palabra en este contexto, pero sé que pronto la encontraré. Sin embargo, puedo adelantar que, en mi opinión, perteneces a un movimiento cuando sus valores rigen en cierto modo tu forma de actuar. Realmente, no hay papel que pueda acreditar tu pertenencia a un movimiento. Eso es algo que ni se firma ni de prohíbe. Si lo sientes, lo sientes. Y nadie podrá impedir que lo hagas. El ‘contrato’ de pertenencia a un movimiento se halla en el corazón de cada uno de sus seguidores.

Me voy ahora a mi caso personal. Creo que es el mejor momento para afirmar que Cartagena es una ciudad con mucho carácter. Tanto, que posee su propio movimiento. Algo así como su propia ideología, la cartagenerista. Siempre he pensado que esto es algo que no debemos pasar por alto. Nuestro movimiento, es un movimiento de ciudadanos, todos ellos deseosos de trabajar por Cartagena y poner su grano de arena para sacar adelante nuestra tierra. Tenemos un movimiento con muchísima personalidad, y hemos conseguido forjarlo a base de escuchar lo que Cartagena dice a gritos y que a los gobernantes que dicen trabajar tan duro por la ciudad les cuesta tanto oír.

Para concluir este escrito, me gustaría reiterar mi compromiso, un compromiso que aún muchos cartageneros están por asumir, en el Movimiento Ciudadano. Sin duda, mucho más que un partido político.

Por cierto, para las próximas elecciones, yo lo tengo Muy Claro.